Una de las vistas más refrescantes del verano es la de una piscina iluminada por el sol, haciendo que el agua cristalina brille y se antoje nadar un rato. En definitiva, pasar una tarde en familia o con los amigos es un plan muy divertido pero, ¿el agua está realmente desinfectada? Puede que en apariencia el agua se vea transparente pero no es suficiente. Recuerda que es imprescindible proteger la salud de los bañistas, en este caso la de tus seres queridos, y sólo es posible si el agua se mantiene desinfectada. ¿Por qué es tan importante?, en nuestro artículo: "¿Por qué es necesario aplicar cloro a mi piscina o alberca?" abordamos más el tema.

Todos los dueños de albercas saben que para obtener el agua libre de microorganismos es necesario emplear cloro en cualquiera de sus presentaciones. Por eso, a continuación te contamos cómo calcular el volumen de tu piscina para que la dosificación de químicos sea la adecuada.

piscinas (1)

Para determinar el volumen vas a multiplicar según la forma:

  • Ovalada: Largo x Ancho x Profundidad media x Coeficiente (0.89).
  • Rectangular: Largo x Ancho x Profundidad media.
  • Redonda: Diámetro x Diámetro x Profundidad media x Coeficiente (0.785)
Para poder calcular el total de litros: multiplicarás el Volumen (m3) x 1.000 litros/m3

Los tipos de cloro y las dosis recomendadas

No todas las piscinas están hechas y recubiertas con el mismo material, por lo tanto no pueden usar el mismo tipo de cloro. Por ejemplo, el hipoclorito de sodio es ideal para las piscinas de lona y se recomienda su uso cotidianamente, sobre todo en la temporada de verano cuando más se usa la alberca. La dosis diaria que recomendamos es de 50 ml por cada 1.000 L de agua.

Hipoclorito

El cloro granulado es ideal para piscinas con revestimiento veneciano o cualquier recubrimiento resistente al cloro. Se vierte directo a la piscina sin necesidad de premezclar ni usar red. Ayuda a la prevención del crecimiento de algas en las uniones del recubrimiento. Su dosificación es de 10 g por cada 10.000 L de agua. cloro-granulado

El cloro en polvo es cloro al 90%. Recomendamos su uso en piscinas con pintura o recubrimientos como chukum. Es importante premezclarlo con agua y aplicarlo con una red. La dosificación es de 10 gramos de cloro por cada 10 mil litros de agua. 


Las tabletas de cloro se agregan al agua de la piscina por medio de cloradores automáticos o flotadores. Este producto no es un sustituto de los otros tipos de cloro, sino como un reforzamiento entre cada mantenimiento que se le dé a la piscina. En Jose Barroso te ofrecemos diferentes tipos de pastillas que dan diversos beneficios: 

 

Por último, lo que marca la diferencia entre una piscina con agua cristalina, fresca y desinfectada a una que se mantiene turbia y en constante riesgo de tener algas es: la filtración, aspirado y que el tratamiento químico se realice de manera efectiva y oportuna. ¿Tienes dudas o requieres alguna asesoría? Con gusto te ayudamos, solo tienes que escribirnos aquí y uno de nuestros técnicos certificados te contactará a la brevedad.